La esencia de los salones minimalistas se basa en la simplicidad, la funcionalidad y la armonía visual, logrando así espacios elegantes y acogedores sin recargar el ambiente. De ahí que el estilo minimalista siga evolucionando y consolidándose como una de las tendencias más buscadas en la decoración de interiores.
Así que, si quieres darle a tu salón un aire moderno, ordenado y sofisticado, no te pierdas este artículo de Molimobel. Te contamos las últimas tendencias en salones minimalistas para que puedas conseguir un espacio que combine diseño y confort.
Colores neutros y tonos cálidos
El minimalismo tradicional se ha caracterizado por el uso de colores neutros como el blanco, el gris y el negro. Sin embargo, en las últimas tendencias, estos tonos se complementan con colores cálidos y naturales que aportan mayor sensación de confort. De esta forma, el beige, arena, tierra y los tonos marrones suaves se han convertido en protagonistas en paredes, muebles y textiles, aportando un aire más acogedor sin perder la esencia de este estilo.
Además, los salones minimalistas modernos incorporan sutiles toques de color en pequeños detalles, como cojines, alfombras o jarrones en tonos verdes, rosas, azulados o terracotas, manteniendo el equilibrio visual sin romper la armonía.
Muebles de líneas sencillas y funcionales
El mobiliario en un salón minimalista sigue una premisa clave: Menos es más. En este estilo se apuesta por muebles de salón con líneas rectas, estructuras ligeras y diseños sin excesos decorativos. Los sofás de estilo modular, con tapizados en tonos neutros y formas suaves, son tendencia, ya que combinan estética y comodidad.
Por otro lado, las mesas de centro elevables o extensibles, junto con muebles de almacenamiento con frentes lisos y sin tiradores, permiten mantener la funcionalidad sin recargar el ambiente. Además, los muebles suspendidos, como estanterías flotantes y aparadores colgados en la pared, ayudan a crear una sensación de ligereza y amplitud en el salón.
Materiales naturales y texturas orgánicas
Una de las grandes novedades en los salones minimalistas actuales es la incorporación de materiales naturales y texturas orgánicas para dar un toque más acogedor y evitar que el espacio se vea demasiado frío. De esta forma, la madera en tonos claros o naturales son una de las opciones más populares para la fabricación de mesas, estanterías y suelos.
El mármol y el microcemento también están en auge, sobre todo en encimeras o detalles decorativos, aportando un toque de sofisticación. Otra forma de añadir calidez es con el uso de textiles de lino, algodón y lana en alfombras, cojines y cortinas.
Espacios abiertos y sensación de amplitud
Una de las principales premisas del minimalismo es la sensación de amplitud y orden. Para ello, se busca reducir al mínimo la cantidad de muebles y objetos decorativos, dejando espacios despejados y bien organizados.
Los salones abiertos, que se integran con la cocina o el comedor, son una de las tendencias más populares en los hogares modernos. Y para mantener la cohesión visual, se utilizan muebles modulares y paneles divisorios ligeros que permiten delimitar las zonas sin interrumpir la continuidad del espacio.
Elementos decorativos en su justa medida
En un salón minimalista, la decoración debe ser cuidadosamente seleccionada para evitar la saturación visual. Se priorizan piezas de arte en gran formato, espejos con marcos sutiles y jarrones de cerámica en tonos neutros.
Las plantas de interior se han convertido también en un elemento clave en la decoración minimalista, ya que aportan frescura y un toque natural al espacio sin sobrecargarlo.
Tecnología integrada y orden visual, premisas de los salones minimalistas
Para mantener la estética limpia y ordenada, la tecnología en los salones minimalistas se integra de forma discreta. Los muebles con espacio para ocultar cables, los televisores ultrafinos y las soluciones de almacenamiento inteligentes permiten mantener un entorno organizado sin demasiados elementos a la vista.
Además, el mobiliario multifuncional, como sofás con almacenamiento o mesas con compartimentos ocultos, es clave para optimizar el espacio y mantener el orden sin perder estilo.
Conclusión
Los salones minimalistas han evolucionado en los últimos años hacia espacios más cálidos y acogedores sin perder su esencia funcional y estética. La combinación de colores neutros con tonos cálidos, materiales naturales, iluminación equilibrada y muebles de diseño sencillo, crea espacios de revista, tan prácticos como bonitos.
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