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Claves para desinfectar la cocina a fondo

Claves para desinfectar la cocina a fondo

Aunque poco a poco volvemos a la normalidad, o lo intentamos, por ahora nos toca aprender a convivir con el coronavirus. Así que además de respetar al máximo las medidas de seguridad en la calle, también es importante saber qué hacer en casa para evitar el contagio, especialmente ahora que podemos empezar a recibir visitas. En este caso os queremos dar algunos consejos para desinfectar la cocina a fondo y cocinar de la manera más segura para todos.

Limpiar antes de desinfectar la cocina a fondo

El primer paso para cumplir con una correcta desinfección de la cocina es limpiarla y ordenarla. Ya que con la limpieza eliminamos el polvo y algunos de los muchos organismos que viven en zonas como el frigorífico, la encimera, cajones, pomos o armarios. Si no te sientes motivado a la hora de limpiar tu cocina, quizá sea el momento de cambiar sus muebles y darle un aspecto totalmente renovado a esta estancia tan importante. En Molimobel tenemos la cocina con la que siempre has soñado. Te aseguramos que una vez que renueves tu antigua cocina te encantará pasar el máximo tiempo posible en ella, disfrutando de su comodidad y el acabado de cada uno de sus materiales y acabados.

Una vez terminada la tarea de limpiar los recovecos de todos los muebles y encimeras con una bayeta con agua y jabón, es el turno de ordenar los alimentos y despejar al máximo la zona de trabajo. De esta manera será más fácil y cómodo desinfectar todas las veces que sea necesario.

Y al final de cada día lo ideal es desinfectar las bayetas con agua y lejía.

¿Cómo desinfectar la cocina?

Hoy en día existen muchos productos para desinfectar la cocina a fondo. Es importante que antes de optar por uno u otro conozcamos si son compatibles o no con los materiales de la cocina, ya que algunos de ellos pueden resultar corrosivos.

En caso de duda, puede ser suficiente con la mezcla de agua y jabón, aunque a ésta puede añadirse amoniaco, que es menos corrosivo que la lejía en muchas superficies. El coronavirus es vulnerable a los desinfectantes y al jabón, ya que este virus cuenta con una membrana grasa alrededor que se disuelve fácilmente con productos jabonosos y desinfectantes.

Aunque si las superficies lo permiten, la mezcla de agua y lejía nunca falla. Aunque si se opta por este método es importante ventilar bien la estancia. Desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan mezclar cuatro cucharaditas de lejía por cada litro de agua y dejar que haga efecto durante un minuto antes de secar la superficie.

Además de la lejía diluida, otros desinfectantes que ayudan a eliminar el coronavirus de las superficies y que pueden pulverizarse sobre ellas con ayuda de un aplicador de spray son el agua oxigenada y el alcohol. Otra opción para aplicarlos son las toallitas desinfectantes o el papel de cocina. En cambio, un producto que no es útil para este caso es el vinagre, ya que aunque tiene muchas propiedades, entre ellas no está la de desinfectante.

Cada producto desinfectante especifica en su envase el tiempo que deben dejarse al aire libre para que hagan efecto. Algunos de ellos necesitan sólo 30 segundos y otros varios minutos. Por otro lado, es importante lavarse bien las manos antes y después de limpiar. Aunque si se tienen guantes, mejor que mejor.

Desinfectar la vajilla y los alimentos

Para eliminar cualquier tipo de virus de la vajilla, algunos lavavajillas cuentan con la opción de desinfectar. Aunque en caso contrario se deberá establecer un programa que alcance la temperatura de 70 grados centígrados, que resulta mortal para la mayoría de virus, incluido el Covid-19.

Si no se cuenta con lavavajillas, lo ideal es fregar con agua caliente.

En cuanto a los alimentos, las autoridades han advertido que no son fuente de transmisión del virus por sí mismos. Sin embargo, esto no quita que pudiera darse el caso de que el packaging que los recubre sí haya sido manipulado de forma incorrecta por personas que podrían estar infectadas. En estos casos, si se quiere estar más tranquilo, puede pasarse un trapo humedecido con un producto desinfectante o agua jabonosa sobre botes de cristal y botellas. En otros casos se podrá tirar directamente el envoltorio, como por ejemplo el cartón de yogures, latas en conserva, cereales, etc.

No olvides lavarte las manos después de manipular la compra.

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