¿Alguna vez has oído hablar del Feng Shui? No se trata de una religión, ni de un estilo decorativo oriental, sino de un arte milenario que trata de distribuir los muebles y los objetos decorativos de forma que la energía fluya mejor por la casa.
Según los principios de esta filosofía, cada uno de los espacios de la casa tiene un tipo de energía dependiendo de su función. Los espacios privados tienen un tipo de energía denominada Yin, mientras que los públicos como el salón tienen energía Yang.
En este artículo nos centramos en el dormitorio, ya que es uno de los espacios de la casa más importantes para esta teoría, ya que según ésta durante el sueño somos más vulnerables a las energías del entorno. Para el Feng Shui el dormitorio es también un santuario donde retirarse para lograr el descanso a través del sueño y la desconexión.
La forma del cuarto
Si queremos que nuestra habitación siga todos los parámetros que manda el Feng Shui, deberemos apostar por una forma cuadrada o rectangular, lo más cercana posible a la forma cuadrada, ya que es la geometría que corresponde al elemento Tierra y que aporta mayor estabilidad y equilibrio.
La cama
Según estas teorías, el lugar donde se coloque la cama es uno de los puntos más cruciales para un dormitorio.
Para un buen descanso, el dormitorio requiere que se genere suficiente energía Yin, y dado que las puertas y las ventanas implican energía Yang, movimiento, exposición y luz, el cabecero de la cama deberá colocarse en una pared o tabique sin ventanas ni puertas. A ser posible, esta pared deberá ser la más alejada también de la puerta de entrada.
Respecto al cabecero de la cama, mejor los construidos en madera o los tapizados, ya que combinan firmeza, comodidad y apoyo para la energía, tanto nuestra como la de nuestro dormitorio.
La altura de la cama también es importante, para dejar que la energía fluya bajo ella, se necesitará que la cama esté a una altura razonable, a ser posible con un espacio no tapado por cajones, ya que según el Feng Shui la energía necesita circular por todo el cuerpo mientras dormimos.
Las mesitas, por su parte, aunque no tienen porqué ser iguales, sí que es recomendable que sean armoniosas, especialmente si compartimos la cama con nuestra pareja.
De igual modo se recomienda poner accesorios en número par: Dos plantas, dos velas, dos cuadros o cuatro… El número dos es el número de la pareja, el uno se asocia a la soledad y el tres puede implicar la existencia de terceras personas.
La importancia del colchón
Para conseguir una buena energía en nuestro dormitorio también es importante invertir en el colchón adecuado, ya que éste será de vital importancia para dormir mejor y relajarnos.
Según los principios del Feng Shui, nunca deberás comprar colchones usados, porque no sabes cuál será la energía acumulada por sus dueños anteriores.
Qué evitar en la habitación de acuerdo con el Feng Shui
Empezando por el color, deberemos evitar los colores muy fríos y aquellos excesivamente estimulantes, ya que estos podrían generar intranquilidad y dificultar el reposo.
Los elementos electrónicos que generen ruido como la televisión, el ordenador o una pecera también deberán evitarse. De igual modo, también es recomendable no contar en la habitación con objetos que nos recuerden a actividades muy dinámicas como la bicicleta estática o la tabla de flexiones. También deberemos evitar tener cerca papeles desordenados del trabajo o proyectos inacabados.