¿Por qué se ponen zócalos en la cocina?

En el diseño de una cocina hay un elemento fundamental que no podemos pasar por alto. Hablamos de los zócalos o rodapiés. Ya que además de ocultar las patas de nuestros muebles de cocinas en Granada, también tienen la importante función de protegerlos de la humedad y la suciedad habitual de esta zona de la casa. ¿Quieres conocer más información de la función y la importancia de los zócalos en la cocina?

¿Qué son los zócalos y cuál es su función en la cocina?

Los zócalos en la cocina, o en cualquier otra estancia de la vivienda tienen principalmente dos funciones prácticas.

La primera de ellas es la de proteger la esquina que forma la pared con el suelo de la suciedad y los posibles roces de los usuarios o muebles. Ya que esta parte de la pared es muy susceptible a golpes y manchas, especialmente las que se provocarían con el continuo uso de la fregona en el suelo.

Por otra parte, ayudan a camuflar las imperfecciones del pavimento al perfilar el encuentro de las losetas y la pared.

Los rodapiés pueden fabricarse en diversos materiales, siendo los más comunes la madera, la cerámica o el metal. Y normalmente comparten el color y material del suelo. Aunque otras veces se opta por crear un contraste al elegir otro color.

En el caso de las cocinas la cosa cambia. Los zócalos en la cocina se encuentran generalmente bajo los muebles bajos e impiden que la suciedad y la humedad se cuelen en la parte de los muebles que se encuentra paralela al suelo.

Se trata de un elemento esencial de las cocinas, excepto si los muebles son suspendidos y se encuentran a varios centímetros por encima del suelo. Aunque en estos casos queda más desaprovechada la zona inferior de los muebles de cocina.

¿Cómo deben ser los rodapiés de la cocina?

Para que el rodapié o zócalo esté en armonía con el diseño total de la cocina, es importante elegir el material y color adecuados. Ya que este elemento de no más de dieciocho centímetros puede tener un gran peso visual en la imagen total de la cocina.

Los zócalos en las cocinas pueden ser también de distintos materiales. Por ejemplo, una opción es ponerlo del mismo material que el mobiliario, que el suelo de la cocina, o bien por el versátil aluminio en sus múltiples acabados (rayado, mate o brillo).

Cuando diseñamos junto a nuestros clientes la cocina de sus sueños, una de las cosas a tener en cuenta es la altura de los muebles bajos. Esta dependerá de la propia altura de los usuarios y de sus preferencias con las que se sientan más cómodos. Por lo que para poder adaptarnos mejor utilizamos las diferentes alturas de las patas.

Cuando se define la altura del mueble, se procede a colocar el zócalo, que suele contar con una goma en la parte inferior para impedir la entrada de agua y suciedad por debajo del mueble.

¿Zócalos de aluminio o de madera para la cocina?

Los rodapiés de aluminio tienen la gran ventaja de ser muy fáciles de limpiar y mantener. Además, se trata de un material que ofrece muchas opciones por los distintos acabados y colores en los que puede encontrarse. Por lo que es muy fácil que este elemento combine bien con el diseño de la cocina y con su estilo. Sin duda, el aluminio es el material estrella en cocinas modernas, especialmente si se elige el tipo adecuado o que vaya a juego con los electrodomésticos.

La otra alternativa más habitual es preferir que el zócalo sea del mismo tono y material que los muebles de la cocina. En estos casos, los zócalos de madera consiguen un acabado más robusto. Por lo que es preferible en cocinas más clásicas o en las que se quiera conseguir que la madera sea el material estrella.

En cuanto a la instalación, ambos tipos se colocan igual; con ayuda de unos ganchos en una guía horizontal que se abrazan a las patas de los muebles.