Para muchas personas conciliar el sueño en verano se convierte en todo reto. Y más, si se trata de afrontar una ola de calor como la que atraviesa el país en estos momentos. En estos casos son muchos los factores que influyen para combatir el insomnio en los meses de más calor y asegurar un buen descanso. Aquí van algunos consejos que te ayudarán a conseguirlo.
Tener un buen colchón, fundamental para mejorar el sueño
Aunque este ‘tip’ no sólo se aplica en verano, contar con un buen colchón es esencial para conciliar el sueño antes y dormir más plácidamente. Además, comprar un colchón adecuado evitará que se sufran multitud de problemas musculares; dolores de espalda y articulaciones. Por otro lado, invertir en un buen colchón ayudará a reducir otros problemas que afectan a la salud general como el estrés y el cansancio.
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Además del colchón, para conciliar el sueño el verano también es importante vestir la cama con sábanas ligeras, como la ropa de cama de algodón. Ya que este material natural transpira mejor, favorece la renovación del año, evita la sudoración y resulta de gran comodidad para dormir mejor.
Temperatura ideal para dormir en verano
La temperatura es el principal factor que debe tenerse en cuenta para conciliar el sueño en verano y poder descansar. Ya que durante el estado del sueño REM, la temperatura corporal se ajusta a la temperatura ambiente. Así que cuando las temperaturas son extremos, el sueño se interrumpe y se sufren despertares continuos, reduciendo la cantidad y la calidad del tiempo de descanso.
La temperatura ideal para dormir en verano debe encontrarse entre los 20 y 28 grados. En este sentido es importante cuidar el sistema de refrigeración. Para ello, las persianas deberán cerrarse en verano, impidiendo que los cristales de las ventanas de casa desprendan mucho calor. Mientras que durante la noche lo ideal es abrir persianas y ventanas para que el fresco pueda entrar en la habitación.
Darse un baño con agua tibia
Otro truco para conciliar antes el sueño en verano es darse una ducha o un baño con agua tibia antes de irse a dormir. Aunque en estos meses de calor extremo mucha gente prefiere las duchas de agua fría, pensando que éstas le ayudarán más a refrescarse, lo cierto es que la sensación de fresco será más duradera si el agua del baño está tibia.
Esto se debe a que el cuerpo tiene una temperatura externa de treinta y seis grados. Por lo que ducharse con agua fía hace que sintamos más rápido el calor posterior porque el organismo se reactiva de una forma más brusca.
Dispositivos móviles apagados para dormir mejor
Hoy en día resulta algo normal dormir con el móvil en la mesita, o incluso entre las sábanas. No obstante, si se quiere mejorar la calidad del sueño es importante apagar todos los dispositivos electrónicos. De esta manera evitaremos distracciones en el momento de irnos a la cama, así como ruidos y luces que pueden interrumpir el sueño y echar a perder todos nuestros esfuerzos por conciliar el sueño.
Si se utiliza la alarma del móvil, lo ideal es poner el dispositivo el modo avión.
Sigue una rutina más o menos fija y apuesta por las cenas ligeras
Otra de las cosas que impiden que tengamos un buen descanso en verano es la modificación de hábitos y rutinas. Para coger antes el sueño se recomienda intentar acostarse siempre a la misma hora y cuidar la alimentación. Cenar temprano y de manera ligera, te ayudará a conciliar antes el sueño en la cama.